Llevar las riendas de tus cuentas de redes sociales puede parecer fácil a nivel personal, pero a nivel negocios no lo es tanto.
Si la gente no sabe o no entiende de qué se trata tu negocio, si la cuenta se ve descuidada, si no hay integración entre las diferentes redes, si tus seguidores no participan ni aumentan en cantidad y si las redes no repercuten en tus ingresos: algo anda mal.
Cuando da lo mismo tener redes que no tenerlas, o peor aún, cuando juegan en contra de tu negocio, ¡Ha llegado la hora de contratar a un Community Manager!
Lo que te permitirá, además, tener tiempo para dedicarte a tu negocio, pues las redes pueden llevar mucho tiempo en algunos casos.
¿Por qué necesitas un Community Manager?
En primer lugar, para que una marca se vea “seria”, es decir: confiable y prometedora, debe tener una coherencia editorial, debe utilizar imágenes de gran calidad, generar contenido y plantearse estrategias; y eso se hace evaluando al público objetivo: deseos, intereses, rango de edades y más.
No todas las empresas necesitan de la utilización de todas las redes disponibles, esto depende del perfil de la empresa.
Muchas personas hoy en día se venden como Community Managers (CM) por sólo tener idea de cómo manejar Instagram. Ten en cuenta que no cualquiera es profesional y es un trabajo que vale, así que procura que la persona que contrates tenga experiencia en el rubro de tu negocio y que te muestre otras cuentas que maneja.
Deberá saber diseño (o trabajar con un diseñador), tener buena redacción, empatía con el público y sobre todo ideas.
El CM será responsable de crear lo que se llama “engagement” que es la participación y el ida y vuelta entre los usuarios y la marca. Lo que crea un vínculo afectivo emocional y una relación con los clientes a largo plazo, ya sea reteniendo a los que ya existen o yendo a la búsqueda de nuevos a través de sorteos y campañas, entre otras cosas.
Dentro del mundo digital podrás obtener además un gran feedback sobre tu empresa que tu CM sacará fácilmente de las estadísticas que proveen las redes sociales y también de los comentarios, quejas y sugerencias de usuarios, lo que será de gran ayuda para mejorar en tu negocio.
También el Community Manager podría generar algunas ventas a través de la dinamización social media en torno a la toma de decisiones del comprador, es decir, que si el comprador tiene alguna duda sobre el productor y el servicio, por lo que esta persona las podría aclarar (si está facultado para ello) y así incidir en la decisión final del consumidor.
El Community Manager presenta su marca al mundo como una personalidad simpática y conocedora con la que los demás no pueden evitar comprometerse, y saca a la luz oportunidades para alimentar discusiones positivas sobre sus productos y en torno a ellos, al igual que podrá gestionar la reputación online. Ya que ellos vigilarán lo que se dice de la empresa o de sus productos/servicios en Internet, en sitios como foros, sites de información, blogs, etc… con la idea de prevenir crisis o gestionarlas en caso de que se produjeran.
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